Recordando qué es un periodista en Los archivos del Pentágono
No suelen gustarme las películas de periodistas, a pesar de ser un estudiante de dicha profesión, porque me resultan pesadas y demasiado liosas con todos los nombres que entran en la trama. No obstante, sí que suelen gustarme las películas de Steven Spielberg y más si las protagonizan grandes veteranos como Meryl Streep y Tom Hanks. Es por eso que las expectativas que llevé a la sala eran completamente planas. Me dejé sorprender.
Los archivos del Pentágono trata sobre uno de los secretos mejor guardados de Norteamérica, la mentira sobre la guerra de Vietnam. Cuatro presidentes de Estados Unidos ocultaron datos y realidades a los ciudadanos de su país solamente por evitar un desastre de reputación nacional, una humillación. Varios periodistas del New York Times publican en 1971 unos documentos clasificados del Pentágono que informan sobre este asunto y pronto se les unirá el Washintong Post.
La trama de la película va a contar la historia del director del Post y su editora durante esta crisis de estado. Meryl Streep, en el papel de Katharine Graham como la editora y sucesora de los dueños del periódico, y Tom Hanks, como Ben Bradlee, el atrevido director del periódico; sustentarán toda la acción, cada uno en su campo. Katherine luchando contra inversores y demás directivos que la atacarán como garrapatas buscando su fracaso y Ben en el ámbito más periodístico del contenido del periódico.
¿Qué ha hecho que me guste esta película?
Creo que toda película, aún ambientada en el pasado y basada en hechos reales, se hace en determinada época por algún motivo en concreto que relacione dicho momento histórico con el presente y ambiente de su realización. Este filme es un claro ejemplo de varios aspectos que hoy en día deben ser estudiados en el ámbito, en este caso, del periodismo:
- La mujer como representación de poder independiente y fuerte. A lo largo de toda la película veremos a una editora jefa de uno de los periódicos más importantes de la historia luchar por sus ideales sin verse mermada por el hecho de ser mujer. Spielberg nos ofrecerá, muchas veces de manera muy sutil, la gran capacidad de esta señora para crear comunidad feminista y luchar sin darse cuenta por la supremacía de las mujeres en los cargos de poder. Secciones destinadas a mujeres tratando temas del hogar, conversaciones solo para hombres sobre economía y política... Nuestro personaje se saldrá de estos esquemas y luchará por sus propias ideas reflejando en muchas secuencias una fuerza arrolladora.
- La crisis del periodismo no es cosa de hoy. Spielberg conoce el Washington Post y propone sin darnos cuenta una comparativa entre el periódico de aquel entonces y el de ahora. En ambos momentos pasa por una crisis de contenido, de periodistas, económica... Hoy en día se sustenta gracias al dinero de Jeff Bazos, dueño y fundador de Amazon, que compró el periódico en 2013 por una mínima parte de su fortuna.
"La única forma de defender el derecho de publicación es publicando"
- Un periodista siempre ha de ser fiel a la verdad y al ciudadano, nunca amable con el poder. Toda la película queda marcada por el dilema de publicar o no por miedo a ser censurados por el estado. Pero es que un periódico vela por la seguridad de los ciudadanos y no del poder. Muchas buenas frases se dejarán caer en el guion sobre este tema.
"La prensa sirve a los gobernados, no a los gobernantes"
- El trabajo de publicación de los periódicos no es tan sencillo como parece. Ben Bradlee era en 1971 el director del periódico, además fue un gran amigo de JFK y lo cerca que estuvo de Jackie en sus peores momentos. En una escena de la película cuenta el asesinato del presidente y pone sobre la mesa de manera muy sutil el problema de publicar información sobre amigos, o simplemente personas a las que les puede doler una información.
"Se puede ser fuente o amigo, hay que elegir una de las dos"
Aspectos técnicos
Algunos me matarán pero he de decirlo, hacía tiempo que no veía a Spielberg arriesgarse con ángulos de cámara, planos imposibles, planos secuencia... Me ha sorprendido gratamente y he disfrutado durante toda la película de una composición de imágenes realmente agradable a la vista. Sobre todo durante el proceso de impresión de los periódicos, las escenas en las que seguimos los documentos y no a los personajes... Me encanta que sean las imágenes las que hablen y digan más que las palabras, aunque el guion, ya hemos dicho, no se queda para nada corto.
La estética heredada de películas como Atrápame si puedes nos transporta directamente a los años setenta al más puro estilo Spielberg: muchas veces la luz es escasa y otras es deslumbrante llegando incluso a difuminar los haces. El eterno cigarro en manos de los periodistas es, sin duda, otro de los puntos que consigue atraparnos en la trama.
En conclusión, la película esta muy por encima de otras como Todos los hombres del presidente sobre un caso posterior del Post, El Watergate; o recientes cintas como Spotlight que curiosamente se hacía pesada y lenta a pesar de tener una trama compleja. Los archivos del Pentágono es una oda al periodismo y un recordatorio de su función como cuarto poder.
