El muñeco de nieve: un thriller innecesario
El muñeco de nieve es un thriller bastante flojo. Un argumento demasiado convencional más propio de la hora de la siesta de Atresmedia que de una sala de cine. La trama se centra en perseguir a un asesino macabro que siempre deja un muñeco de nieve en el lugar del crimen. El encargado del caso va a ser Harry Hole, interpretado por un Michael Fassbender que no acaba de encajar en el papel.
La historia es, en esencia, sencilla ya que persiguen al asesino durante toda la película sin dar prácticamente información al espectador, como en cualquier thriller, excepto al final donde todo parece encajar y se resuelve en una escena estereotipadamente “activa” (no es el caso).
El inicio del filme es muy dramático e invita a continuar con el visionado de la película. Suponemos que el niño que sufre se trata del asesino en su infancia y por este trauma va convertirse en un psicópata. A medida que avanza la historia esta montaña rusa cae mucho antes de llegar a lo más alto.
El argumento se vuelve soso y aburrido a partir de los primeros veinte minutos de metraje, en muchos casos perdiendo demasiado al espectador con flashbacks innecesarios que aportan un sentido “personal” a la oleada de asesinatos. El final y el descubrimiento del asesino es, cuando menos, predecible pasados treinta y cinco minutos.
Otro punto es la brutalidad de las imágenes de los crímenes. Parece que Thomas Alfredson (director) ha querido proponer algo nuevo en este tipo de películas enseñando excesiva sangre, miembros amputados… Completamente innecesario en todos los casos, no aporta ningún sentido a la narración.
Lo único salvable de la película es la estupenda y brillante fotografía. Los paisajes noruegos aparecen filmados de una manera muy interesante introduciendo de lleno al espectador en la nieve. Los planos de los muñecos de nieve son realmente escalofriantes, pero nada más.
La crítica comparte nuestra opinión como podemos comprobar en FilmAffinity y coinciden que se trata de una pésima adaptación de la novela de Jo Nesbø.
